miércoles, 22 de enero de 2014

MUSAS

En el silencio quedo,
por el quicio amable,
me apartáis de Morfeo.
¡Oh, Musas!
Os filtráis
bosando bosquejos,
tocando un soniquete
cansino,
nimbando mi sentido,
cortejando mi arrebato,
arrastrándome en la noche.
¡Qué locura
embarga mi naturaleza
serena!
¡Qué demencia
corteja mi paz
quieta!...
No me importa el dictamen
de malandrines pérfidos
que humillan mi perspectiva
de sueños blancos.
Ya he escuchado su canto,
ya vivo hechizada por ellas,
ya su son ha calado

mi esencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario