DESTINO
OCULTO
Caminamos por la
sombra,
inflados de frustraciones,
buscamos una luz
que extinga la umbría
que nos mata,
que nos libere de la hipocresía
en la que estamos sumergidos,
que cambie nuestro
destino.
Existimos en una
batalla constante,
contra un ejército
incesante.
Al Norte siempre hay temporal,
y llueve, hasta diluir los
signos
tatuados en nuestra
piel,
sólo la muerte puede
salvar
a los hijos de nuestro
hijos.
Sucumbimos a vocablos
viciados,
condenándonos a la
oscuridad,
ocultándonos nuestro destino
para el que fuimos
creados.
Pero un mantra
insistente
palpita recordándonos
que fuimos elegidos
para vencer.
©
Lola Lirola, Toledo 29 de abril de 2015.